Los que me seguís
desde el principio, habréis visto que nuestro embarazo marcha particularmente
deprisa. La verdad es que, el que aquí escribe, lejos de ser un conejito de
campo capaz de traer al mundo a un equipo de futbol sala en 1 mes, ha tratado
de resumiros sus experiencias he hitos relevantes de los últimos 7 meses.
A estas alturas ya
estamos en la semana 35 y cada día que
pasa se hace una eternidad. Lo esperamos para mediados de Enero y, aunque a la
Amatxo no le apetezca nada ostentar el honor de ser la primera en alumbrar del
año, justo en la semana de Año Nuevo entraremos en la zona “de peligro”.
Con mi suerte, me
veo comiendo las uvas entre contracción y contracción.
Cada vez que le digo
esto a la Amatxo, me levanta la ceja y me llama gafe. No le falta razón y es
que no me cuesta mucho imaginar lo que puede ser celebrar el cumpleaños un día
1 de enero. Ya me veo repartiendo RedBull a los adultos en plan Rave, para que
estén despiertos y no se les note el resacón.
El caso es que la
cercanía del momento, genera montones de emociones y te remueve por dentro. Estamos
en diciembre y nuestro buzón está a punto de reventar con catálogos de juguetes
cada mañana. Esos mismos catálogos que hace nada usábamos para evitar que se
manchase de aceite el suelo de la cocina, hoy te emocionan y te hacen verte a
ti mismo en un futuro cercano escribiendo con el Morrosko la carta a los Reyes
Magos. Aun puedo recordarme a mi mismo sintiendo la emoción de estos días tan
especiales cuando yo era un crio y ardo en deseos de poder vivir de nuevo todo
ello a través de los ojos de mi hijo.
Pensar en estas
cosas me ayuda a sobrellevar la carga de responsabilidad que todo padre enfrenta en esta fase de su
vida. Por eso os animo a todos los futuros padres y madres a dejaros llevar por
la imaginación, pensando en lo que podéis llegar a compartir con los Pekes de
la casa. No todo van a ser responsabilidades!!!!
Buen día,
Padrazos!
1 comentario:
Es un post muy positivo!!!
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