Hoy cumplo 35 años y la
paternidad me ha hecho rejuvenecer. Lo ves todo con otros ojos…
El cansancio y el sacrificio de
cada día se convierten en meras anécdotas de una vida plena, enriquecida por
esta maravillosa experiencia.
Yo, que soy un hombre de los que
se les revuelve el estómago cada vez que piensa que ya falta menos para los 40
y para quien cada cana en el cabello es un recordatorio de una experiencia de
juventud ya vivida, me he terminado convenciendo de que todo esto es totalmente
irrelevante.
La vida cobra un nuevo sentido.
Los objetivos personales son otros. Las responsabilidades se vuelven compañeros
de viaje que sobrellevas con gusto, porque cuando ves una sonrisa al llegar a casa,
todo cobra sentido. Todo es más fácil.
Desde aquí quiero dar las gracias
a mi esposa, por ser una compañera de viaje maravillosa que ha llenado mi vida de
amor y felicidad, a toda mi familia, por estar siempre ahí y a todos vosotros
por las muchas felicitaciones que me habéis hecho llegar en el día de hoy.
Buen día, Padrazos!
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